SOLO quiero dormir. No tengo otro interes, no tengo otro plan para el fin de semana, por más que me esfuerce, las ganas me llevan al piyama, la cama y dormir.
Sé que antes de que se haga de noche voy a volverme a levantar, y me voy a encontrar como ayer, con una noche hermosa, pero disfrutandola sola.
Siento que jamás me voy a poder acostumbrar al ritmo que llevas tu vida, no voy a poder bailar a tu compaz y creo que lo mejor es que lo hagas solo...
Siento, que ya no me necesitas como antes para vivir. Que verme te causa el mismo efecto que no hacerlo, colocaste otras prioridades en tu vida y yo no tengo espacio en ella...
Y no quiero, no quiero, no quiero... pero no quiero ser egoista tampoco y que cada fin de semana sea una nueva discución... que tenga que volver a odiar que te llamen y yo tenga que volver a pasar sola.
Nunca odié tanto mi soledad como ahora, nunca odié tanto un estado de ánimo... nunca pensé que me iba a costar tanto adaptarme a tu ritmo... nunca pensé que nos iba a costar tanto seguir juntos.
Nunca pensé que volvierían los llantos constantes, las discuciones sin feriados y las ganas desganadas...
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